Sony Interactive Entertainment ha dejado en claro que, al menos por ahora, el futuro de PlayStation no pasa por el juego en la nube. Aunque la tecnología ha progresado, la compañía considera que la infraestructura de red actual aún no está preparada para ofrecer una experiencia fluida y sostenible para todos los jugadores.
La nube avanza, pero la red no acompaña
Durante una reciente reunión del segmento empresarial de Sony, Hideaki Nishino, presidente y director ejecutivo de Sony Interactive Entertainment, explicó los motivos por los que la compañía sigue apostando principalmente por el juego local.
“El streaming en la nube avanza bien desde el punto de vista técnico, como hemos demostrado con nuestras ofertas, pero la estabilidad de la red de extremo a extremo no está bajo nuestro control”, afirmó Nishino. Además, recalcó que “el mayor coste por tiempo de juego en comparación con el modelo de consola tradicional sigue siendo un desafío” para Sony.
Según el directivo, aunque la transmisión por la nube amplía las posibilidades de acceso a los juegos, la mayoría de los jugadores siguen prefiriendo jugar de forma local, sin depender de la conexión a internet. “Y creo que PS5 y PS5 Pro han confirmado esta tesis”, añadió.
Un ecosistema fuerte entre PS4 y PS5
Nishino también reconoció que el presente de PlayStation sigue siendo sólido gracias al ecosistema formado por la PS4 y PS5, destacando que más de 124 millones de usuarios activos mensuales siguen jugando en PS4, lo cual demuestra el poder de la consola anterior y la continuidad que buscan muchos jugadores.
“Ahora contamos con un amplio ecosistema de jugadores muy activos en las generaciones de PlayStation 5 y PlayStation 4”, afirmó. “Por lo tanto, es lógico que exista un gran interés en nuestra estrategia para la próxima generación de consolas”.
Aunque evitó dar detalles específicos, aseguró que “el futuro de la plataforma es nuestra prioridad” y que trabajan en “una forma nueva y mejorada para que los jugadores interactúen con nuestro contenido y servicios”.
Sony apuesta a ingresos estables y recurrentes
Lynn Azar, vicepresidente sénior de finanzas y desarrollo corporativo de Sony Interactive Entertainment, también intervino en la reunión y respaldó las palabras de Nishino. Según Azar, la estrategia de Sony ha permitido reducir la ciclicidad del negocio, manteniendo ingresos constantes gracias a las microtransacciones y los servicios de suscripción.
“Esto ha impulsado un nivel general alto y estable de inversión en contenido y servicios, que, por cierto, ahora representan más de dos tercios de nuestros ingresos”, explicó. Con esto, Sony ha logrado construir una base financiera más consistente, predecible y rentable.
¿Y la próxima generación?
Si bien Sony ha sido reservada sobre los planes de su próxima consola, se sabe que ya hay trabajos de investigación y desarrollo en marcha. Una declaración previa de 2022 indicó que la compañía consideraba lanzar la PS6 después de 2027, pero aún no hay anuncios oficiales.
Por ahora, el enfoque sigue estando en mejorar la experiencia local en PS5 y PS5 Pro, dejando la nube como un complemento, no como el núcleo de la estrategia.
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